En Asia apenas quedan 3.000 tigres en libertad. Frank Cuesta visita las selvas de Tailandia buscando tan bello y salvaje animal. Cuando menos se lo espera, el aventurero tiene un tenso encuentro con un tigre salvaje. Frank visita el templo del tigre, un lugar donde monjes budistas y felinos conviven en extraña armonía. La historia cuenta que hace muchos años un campesino dejo un tigre malherido en la puerta del templo. Los monjes lo curaron y lo dejaron viviendo con ellos. A partir de entonces decenas de tigres crecieron allí. Cada día son paseados y entrenados por los monjes en total sintonía. Ya en la selva, Frank se encuentra con un tigre salvaje. Lo escucha llegar y se tira al suelo. "Tienes que hacerte el muerto. Si le retas, no lo cuentas", confiesa Frank.